Tras el accidente de avión en el que Paolo perdió la vida, el CISP formuló un proyecto que le recordara en la forma en que él imaginaba la cooperación al desarrollo.
Paolo murió en Etiopía, pero lo más importante es que vivió allí durante muchos años. Estaba unido al país por un vínculo especial formado por un profundo conocimiento de su historia y su amistad con muchas personas que viven allí. Entre las regiones del país que Paolo conocía y a las que había viajado, elegimos Hararghe Occidental y la ciudad de Chiro.
Para Paolo, trabajar desde la perspectiva de las personas y las comunidades y sus necesidades era extremadamente importante, y por eso decidimos centrarnos en la Escuela Preparatoria de Chercher, una escuela pública de Chiro que sirve a la comunidad local.
Identificamos una necesidad: la biblioteca de la escuela, un lugar en el que, entre otras cosas, los niños y niñas con medios limitados pueden encontrar herramientas y materiales para el estudio y la formación continua.
Creamos un fondo de ayuda para financiar la construcción y el equipamiento de la biblioteca. El coste final de la biblioteca fue de 55.700 euros.
Con los fondos restantes y los que seguiremos recaudando, estableceremos becas para dar apoyo en alojamiento y manutención a las niñas que no puedan costear sus estudios.